PREOCUPA DECISIÓN EDUCATIVA DEL CONSEJO SUPERIOR DE EDUCACIÓN


En un mundo donde el desarrollo científico y sus aplicaciones tecnológicas nos muestran aceleradamente nuevos conocimientos respecto del sentido de la vida de la especie humana y su relación con el medio ambiente en el que vive y convive, sorprende la arcaica decisión del Consejo Nacional de Educación de dejar fuera del currículo del Plan Común de la Enseñanza Media (3° y 4° Medio) las asignaturas de Filosofía, Ciencias Naturales (Biología, Física y Química) y Orientación. Es sabido que la filosofía provee a niños y jóvenes al desarrollo de su autonomía un cuanto a pensamiento e ideas propias. Contribuye al desarrollo del pensamiento crítico e invita a contrastar ideas con lo cual se descubren los valores del respeto y la tolerancia que facilitan una convivencia pacífica y armónica. Por su parte las ciencias naturales, a saber la Biología, la Física y la Química, son las ciencias por excelencia para el desarrollo de la curiosidad y la indagación de los fenómenos que ocurren en la naturaleza y que dan en definitiva el sentido práctico de la vida humana y su responsabilidad hacia la especie y las otras especies. Así también la inteligencia artificial y la robótica, irán cada día “reemplazando” al hombre en cuanto a profesiones y oficios, dejándolo peligrosamente dependiente si no somos capaces de hacer uso de ese avance científico y darle un nuevo sentido a la vida. Otras tantas incertidumbres pondrán a prueba nuestra concepción espiritual de la vida producto de los implantes de chips y otros elementos cibernéticos que nos proveerán de funciones biológicas dañadas, dando paso masivamente a la existencia de organismos humanos cibernéticos (ciborg).
Ante todo esto, urge dotar a niños y jóvenes de planes de estudios que tengan una gran cantidad de objetos de aprendizaje ligados a la Filosofía y las Ciencias, pues ello permitirá contar con futuros ciudadanos con una fuerte formación ética, conocimiento de sí mismos, con ideas propias, con pensamiento ilustrado y capaces de mirar a las nuevas tecnologías como medio y no como fines en sí.
Demás está recordar que las malas prácticas y la corrupción generalizada que se ha observado en algunos políticos y algunos empresarios, son ejercidas por ciudadanos que se formaron con Planes de Estudios que ya no consideraban Educación Cívica, menos horas de Filosofía y Ciencias. ¿Existirá alguna relación?

Profesor Carlos Urzúa Stricker

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